Después de siete años desde que el escándalo financiero de Gescartera 'salpicara' a numerosas entidades como el Obispado de Astorga, el de Palencia o el de Valladolid, ayer, la Audiencia Nacional hizo pública la sentencia ejecutoria, que obliga a varias entidades financieras –entre ellas La Caixa y Caja Madrid, que fueron condenadas como responsables civiles subsidiarias– a abonar casi 87 millones de euros en concepto de indemnizaciones.
Por otra parte, Antonio Camacho, responsable de la empresa, ha sido condenado a 11 años de prisión, tal y como pedía la Fiscalía, ocho por apropiación indebida y tres por falsedad documental.
